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Naturaleza y paisaje
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Naturaleza y paisaje
Roses está rodeada de naturaleza por los 4 costados: dos parques naturales, una de las bahías más bellas del mundo y un paisaje de mosaico de viña y olivo.
Un escenario de espectacular belleza visual, con acantilados abruptos, pinos que tocan el mar, calas escondidas y formaciones rocosas que parecen esculpidas por la mano de un artista divino. En la llanura, también marismas y lagunas, hogar de una impresionante diversidad de fauna y flora.
La mano del hombre también ha modelado el paisaje: el valioso patrimonio megalítico y las construcciones de piedra seca hablan de la rica historia de Roses y de su actividad agrícola ancestral.
La última imagen del día que se te quedará grabada en la retina va a cargo de la puesta de sol de roses, una maravilla natural que se convertirá en tu ritual diario.
No solo la vista aprecia el paisaje: el sonido del viento y las olas cuando rompen contra las rocas se mezclan con el canto de los pájaros marinos, aves migratorias y autóctonas, componiendo una sinfonía natural que invita a la relajación y la contemplación.
Los aromas del tomillo, el romero y la lavanda, con la brisa salina, impregnan el ambiente de nuestra esencia mediterránea, crean una atmósfera única que cautiva los sentidos y te conectan con la naturaleza.
El paisaje, ¡un regalo para los sentidos!
